Hete aquí una muestra de la labor gráfica del autodenominado “Asocial” de la Calle Antonio Nebrija. En sus años mozos (apenas tiempo ha) el joven Ángel Marrero gustaba de participar en la culturilla tabernaria lagunera con un fanzine que llevaba él mismo, con sus escasos y rudimentarios medios, titulado primeramente “Relatos Cortos” y más tarde “RC Cómix”. El primer número de esta efímera producción data del año de gracia de 1997, ¡no ha llovido nada desde entonces!, y dado que nuestro joven pintamonigotes pertenecía a la “comunidad rocker chicharrera” estética y espiritualmente por aquel entonces, además de gastar tupé y chupa de cuero, aportaba su granito de arena a esta culturilla urbana, a la par que deleitaba a sus rocanroleros colegachos, con cómics de temática ídem. Los RC Cómix se vendieron inicialmente en un bareto ubicado antaño por una callejuela cercana a la vetusta morada del dibujante Juanan (más conocido por sus maliciosos amiguetes como el “Abogado del Diablo”); y posteriormente en el conocido Bluesbar de la ciudad del Adelantado, a partir del año 98. Como podrán apreciar los verdaderos connosieurs del colorín, el estilo de dibujo del viejo Rocki´Rollin´Angel presenta una marcada influencia “crumbiana”; influencia de la cual finalmente prescindiría, derivando hacia formas más esquemáticas de tipo “cartoon” con los años.
La portada y el sumario presentes pertenecen al número 3 del penúltimo fanzine citado, que vio la luz en el año 2000. Y la historieta titulada “El Follador”, fue uno de esos pocos y afortunados casos en que nuestro dibujante rocker trabajó con un guionista: un muchachuelo “jevi” llamado Pablo García Acosta (me pregunto que habrá sido de él), con el cual realizó otro cómic de 8 páginas titulado “Marta”, incluido en el mismo número y tal vez de próxima aparición en este blog.